La Unión de Iglesias Pentecostales de Chile (UNIPECH), que preside nuestro Obispo Bernardo Cartes Venegas, en conjunto con otras ramas evangélicas nacionales, con fecha 7 de abril del 2020 declaran al país lo siguiente:
“La Plataforma Evangélica de Servicio integrada por una diversidad de entidades evangélicas entre ellas: El Consejo Nacional de Obispos y Pastores, la Mesa Ampliada de Organizaciones Evangélicas, el Concilio Nacional de Iglesias Evangélicas, el Foro Pastoral, la Unión de Iglesias Pentecostales, el Concilio de Iglesias Protestantes e Históricas, las fraternidades pastorales de Cupech, Depain, Frapech, Iglesias, Pastores, Consejos y Unidades Pastorales de todas las regiones del país declaran:
1º.- Reconociendo la gravedad de la pandemia que azota el planeta y sus repercusiones en las diversas áreas de la vida, solicitamos a los pastores e iglesias mantener un fervoroso y permanente espíritu de oración en sus hogares.
2º.- Considerando que la casi totalidad de las iglesias en el país, con el propósito de cooperar y evitar la propagación del virus, han cesado de tener reuniones presenciales, reiteramos un enfático llamado a los pastores e iglesias a abstenerse de realizar todo tipo de cultos y reuniones presenciales durante el período que dure la crisis.
3º.- Instamos asimismo aprovechar la oportunidad de utilizar todos los medios tecnológicos y digitales para continuar dando a conocer las buenas noticias de Jesús, fortaleciendo los corazones, sembrando esperanza y llamando a las almas a escuchar la voz del Creador.
4º.- Reiterar que es indispensable acatar estrictamente cada una de las medidas que vaya tomando la autoridad sanitaria conforme a la cambiante realidad (Romanos 13:1).
5º.- Tener una actitud preventiva y proactiva colaborando en toda obra social con el oportuno socorro a las personas más necesitadas con especial preocupación por las viudas, niños e inmigrantes.
6.- Considerando estos días de semana santa en que recordamos la pasión, muerte y resurrección de Cristo, hacemos un llamado a reflexionar sobre la necesidad de consagración y santidad que Dios espera de Su Iglesia y orar constantemente por nuestra nación.
“Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad”
2a Corintios 12:9″