Una Jornada de Bendición, Unidad y Renovación Espiritual
El jueves 1 de mayo de 2025, en el marco del Día del Trabajador, se celebró un importante y bendecido Encuentro de Oficiales Diáconos en la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile, sector Mulchén Unzueta, congregación que es guiada por los pastores Néstor Vidal Ramírez y Jessica Valenzuela Ojeda, quienes con cariño y dedicación ofrecieron una cálida bienvenida a todos los asistentes.
La jornada fue organizada con esmero para recibir a hermanos que desempeñan la labor de oficiales diáconos, en una instancia espiritual de gran significado. Desde el inicio se vivió un ambiente de reverencia, alegría y fraternidad, manifestando la unidad del pueblo del Señor en torno al propósito de servir con excelencia y fidelidad en la obra de Dios.
Durante la actividad se desarrollaron distintos momentos de adoración, oración y enseñanza. Uno de los puntos más destacados fue la exposición doctrinal a cargo del Pastor Elías Chávez Bascuñán, quien compartió una profunda y edificante reflexión sobre la identidad pentecostal, reforzando la importancia de mantener firmes nuestras convicciones doctrinales y el legado espiritual que ha marcado a nuestra iglesia desde sus inicios. Su mensaje motivó a los oficiales a renovar su compromiso con la sana doctrina y a vivir conforme a los principios que nos identifican como pueblo pentecostal.
Asimismo, las delegaciones de Los Ángeles, Antuco y Monte Águila tuvieron su momento de participación, donde con gratitud compartieron saludos, cánticos y testimonios. Cada intervención fue una bendición, y demostró el amor fraternal y la unidad que reina entre las distintas congregaciones que conforman nuestro sector.
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Nuestro pastor anfitrión, Néstor Vidal, expresó su alegría por el desarrollo de esta jornada, agradeciendo a Dios por permitir que se viviera con tanta bendición. Además, reconocieron el esfuerzo de su congregación local, que con esmero y compromiso colaboró para que todo estuviera dispuesto de la mejor manera, demostrando hospitalidad y espíritu de servicio.
Los participantes manifestaron que fue una experiencia hermosa y enriquecedora, donde no solo se fortalecieron los lazos fraternales, sino que también se reafirmó el valor del rol de los oficiales dentro de la iglesia. Se vivió un día lleno de enseñanza, alabanza y compañerismo, en el que todos regresaron a sus hogares animados a seguir sirviendo con mayor fervor y humildad.
La jornada finalizó con una oración de gratitud y una palabra de envío, recordando que cada uno de los presentes es llamado a ser luz y ejemplo dentro de su congregación, desempeñando sus funciones con amor, responsabilidad y respeto.
Sin duda, este encuentro quedará grabado en los corazones de quienes participaron, como una jornada de bendición que fortaleció el espíritu de servicio, la identidad pentecostal y el compañerismo cristiano. Que el Señor continúe guiando y bendiciendo a su iglesia en todo lugar.
